La exposición muestra mapas, cartas, cuadros, maquetas y elementos varios cedidos mayoritariamente por el Museo Naval, aunque hay que decir que, para completar el recorrido cronológico algunos elementos expuestos son replicas de los originales.
La primera planta de la exposición está dedicada a los siglos XVI y XVII, época de los grandes descubridores, personajes nobles y plebellos que motivados por el deseo de riquezas, aventuras, ansia de conocimiento o misión evangelizadora, se embarcan hacia el Nuevo Mundo. América es una incógnita apenas esbozada mínimamente, como bien refleja el mapa de Juan de la Cosa, primero en el mundo en el que se ve representada parte de las tierras recién descubiertas por Cristobal Colón. Este, en 1502, en su tercer viaje, cuando descubre las costas de la actual Honduras, parece ser que supo por indígenas que más allá de dicha costa existía un riquísimo país y un gran mar. La fiebre del oro americana y la carrera por las colonizaciones había empezado.
El 25 de septiembre de 1513, Vasco Nuñez de Balboa, desde una colina, descubre que al otro lado de aquellas tierras existe efectivamente un gran mar. Lo bautizará como mar del Sur. Desde ese momento, la búsqueda marítima de un paso desde el Atlántico a dicho mar se convierte en una prioridad. Magallanes será el primero en conseguirlo y renombrará el nuevo mar como Pacífico por la tranquilidad de las aguas que encuentra en su recorrido por él. Este viaje, completado por Juan Sebastián el Cano que lo culminará con la que sería primera vuelta al mundo, significará la apertura definitiva de la nueva ruta española a las apreciadas islas de las especias (las Molucas). El océano Pacífico, que por el Tratado de Tordesillas es considerado prácticamente de dominio español exclusivo empieza a ser explorado, descubriéndose con ello a lo largo del siglo XVI y comienzos del XVII una gran cantidad de islas. En 1606 Fernández de Quirós descubre por ejemplo la isla principal de Nuevas Hébridas y, creyendo que era una parte del buscado Continente Austral, la llamó Australia del Espíritu Santo (182 años después Australia sería "redescubierta" por parte de Inglaterra, proclamando su jurisdicción sobre este inmenso territorio. ¡Espabilados los ingleses, si señor!). En otro de aquellos viajes Andrés de Urdaneta (1565) descubre el denominado "tornaviaje", que aprovechando las corrientes marinas y los vientos favorables trazaría una nueva ruta de navegación más rápida y segura, permitiendo a raíz de ello que España organizase la primera ruta comercial estable entre América y Asia, la Ruta del Galeón de Manila, vigente desde 1565 hasta 1815.
La planta segunda de la exposición está dedicada al periodo comprendido entre los siglos XVIII al XXI. Vemos como se irá completando el conocimiento del Pacífico (un mapa del gran océano en torno al 1700 muestra todavía grandes calvas en las regiones septemtrionales y meridionales, además de una gran imprecisión en la situación de numerosas islas y archipiélagos). En los viajes de esta época descubrimos que los marinos van a disponer ya de más adelantos técnicos para la determinación de la posición en el mar y también de mejores buques. La Corona Española organizó numerosas expediciones, principalmente para evitar el asentamiento de potencias enemigas y obstaculizar el comercio ilícito. Entre los viajes que se destacan se resaltan los realizados por Mourelle de la Rua, al que se considera prototipo del marino ilustrado, así como la Expedición Malaspina y Bustamante, considerada la mejor y más completa que se organizó en España durante el siglo XIII y de la que ya hablé en este blog a raíz de la exposición que se organizó en 2010 en el Jardín Botánico.
La presencia española en el océano Pacífico se mantuvo hasta la guerra con Estados Unidos y se cerró con el Tratado de Paz de París del 10 de diciembre de 1898, por el que España salía de las Filipinas y de la isla de Guam, además de Cuba, Puerto Rico y las Indias Occidentales en el Caribe. Al mismo tiempo que se firmaba este tratado, España formalizaba la venta a Alemania de las islas Carolinas, las islas Marianas y las Islas Palaos. La exposición cierra haciendo referencia a la presencia actual de España en el Pacífico a través de su participación empresarial en consorcios, como el que construye las nuevas esclusas del canal de Panamá, pero dada la conflictividad destapada estos días en torno a los sobrecostes declarados de la obra y las amenazas de paralización y ruptura de contrato, no se si es un buen cierre el elegido.
Decir por último que la organización de la exposición ofrece recorridos guiados gratuitos que, sinceramente, merece la pena aprovechar. De martes a sábado son a las 11,30 y 17,00 horas. Domingos a las 11,30 h. (los sábados también hay pase adicional a dicha hora).
Exposición temporal: La Exploración del Pacífico. 500 años de historia.
Lugar: Casa de América (Pza. de Cibeles. Entrada por c/ Marques de Duero,2)
Horario: Martes a sábado de 11 a 20 h. Domingos de 11 a 15 h.
Entrada gratuita (donativo solicitado: 3 €)
La planta segunda de la exposición está dedicada al periodo comprendido entre los siglos XVIII al XXI. Vemos como se irá completando el conocimiento del Pacífico (un mapa del gran océano en torno al 1700 muestra todavía grandes calvas en las regiones septemtrionales y meridionales, además de una gran imprecisión en la situación de numerosas islas y archipiélagos). En los viajes de esta época descubrimos que los marinos van a disponer ya de más adelantos técnicos para la determinación de la posición en el mar y también de mejores buques. La Corona Española organizó numerosas expediciones, principalmente para evitar el asentamiento de potencias enemigas y obstaculizar el comercio ilícito. Entre los viajes que se destacan se resaltan los realizados por Mourelle de la Rua, al que se considera prototipo del marino ilustrado, así como la Expedición Malaspina y Bustamante, considerada la mejor y más completa que se organizó en España durante el siglo XIII y de la que ya hablé en este blog a raíz de la exposición que se organizó en 2010 en el Jardín Botánico.
La presencia española en el océano Pacífico se mantuvo hasta la guerra con Estados Unidos y se cerró con el Tratado de Paz de París del 10 de diciembre de 1898, por el que España salía de las Filipinas y de la isla de Guam, además de Cuba, Puerto Rico y las Indias Occidentales en el Caribe. Al mismo tiempo que se firmaba este tratado, España formalizaba la venta a Alemania de las islas Carolinas, las islas Marianas y las Islas Palaos. La exposición cierra haciendo referencia a la presencia actual de España en el Pacífico a través de su participación empresarial en consorcios, como el que construye las nuevas esclusas del canal de Panamá, pero dada la conflictividad destapada estos días en torno a los sobrecostes declarados de la obra y las amenazas de paralización y ruptura de contrato, no se si es un buen cierre el elegido.
Decir por último que la organización de la exposición ofrece recorridos guiados gratuitos que, sinceramente, merece la pena aprovechar. De martes a sábado son a las 11,30 y 17,00 horas. Domingos a las 11,30 h. (los sábados también hay pase adicional a dicha hora).
Exposición temporal: La Exploración del Pacífico. 500 años de historia.
Lugar: Casa de América (Pza. de Cibeles. Entrada por c/ Marques de Duero,2)
Horario: Martes a sábado de 11 a 20 h. Domingos de 11 a 15 h.
Entrada gratuita (donativo solicitado: 3 €)