De Madrid al cielo

Recuerdo que un antiguo conocido eslogan de la ciudad decía “de Madrid al cielo y, desde el cielo, un agujerito para verlo”.  Yo me he servido de él para hacer la entradilla del tema que hoy quiero tratar, pues sin duda hablar de los rascacielos de Madrid requiere tomar altura.


Hablar de rascacielos es hablar de edificios particularmente altos, aunque no esté claramente identificado cuando una construcción deja de ser alta o muy alta para pasar a ser considerada un rascacielos. Recordemos por ejemplo que cuando en Madrid se levantó en 1930 el edificio de Telefónica en la Gran Vía,  dicho edificio fue considerado por entonces como el rascacielos más alto de España e incluso de Europa. Hoy, pese a seguir destacando en el perfil de la ciudad por estar situado en una de las cotas altas de Madrid, vemos que tiene otros 16 edificios que le ganan en altura y, si la comparación la extendemos al conjunto de España observaremos que desciende hasta el puesto 68. ¡Se está quedando bajito!.


En el cuadro siguiente puedes ver los diez edificios de Madrid actualmente considerados más altos y en donde las primeras posiciones las ocupan las torres del conjunto Cuatro Torres Business Área, levantadas sobre los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid. Son sin duda nuestros gigantes y a los madrileños nos parecen enormes, pero sepamos que la más alta de ellas  -Torre Caja Madrid - ocupa la 10ª posición a nivel del conjunto de Europa y desaparece a nivel mundial del ranking de los 100 rascacielos más altos. Si tienes curiosidad en conocer distintas comparativas de rascacielos (por edificios, continentes, países, comunidades, etc) pulsa sobre este enlace .

Puesto
Edificio
Altura
Nº de plantas
Año de inauguración
1
250 m
45
2009
2
249 m
52
2008
3
236 m
52
2008
4
236 m
53
2007
5
231 m
4 y fuste
1982
6
157 m
43
1988
7
142 m
34
1957
8
121 m
35
1985
9
117 m
25
1953
10
114 m
26
1996

Los rascacielos como tal surgen en el mundo a finales del siglo XIX (el primer edificio considerado como tal fue el Home Insurance Building, construido en Chicago entre 1884 y 1885, y que tenía una altura de diez plantas). Hasta ese momento los edificios no solían superar las seis plantas de altura, pues los materiales utilizados no eran los idóneos para construir edificios más altos.  La llegada de nuevos materiales de construcción como el acero, el aluminio, el hormigón armado y el cristal, así como inventos como el del ascensor (¡imprescindible en estos casos!) impulsó notablemente el que en ciudades desarrolladas y con gran densidad de población comenzasen a construirse altos edificios (si viste la exposición del fotógrafo Lewis Hine de la que ya hablé en este blog en su día recordarás sin duda las famosas fotos que realizó en 1932 a raíz de la construcción del Empire State Building de Nueva York) . Pronto la justificación prioritaria del auge de estos edificios dejó de situarse en el aumento de la habitabilidad por metro cuadrado para dar paso a motivaciones de ostentación, modernidad e imagen de poder económico y político, rivalizando empresarios y gobernantes por poseer para si y sus ciudades los rascacielos más altos (ver aquí el ranking de ciudades del mundo con más rascacielos, según se documenta en Wikipedia.

A fecha, el rascacielos Burj Khalifa de Dubai mantiene desde su inauguración en enero de 2010 el privilegio de ser, con sus 828 metros de altura, el edificio más alto del mundo, pues aquel otro proyecto que en su día se anunció de construir uno que lo superaría en China, concretamente en la ciudad de Changas, fue finalmente desestimado en 2014 (el pretendido Sky City One, nombre de este proyecto, era especialmente sorprendente porque pretendía levantarse además en tan sólo 90 días utilizando elementos de construcción prefabricados). No obstante, siendo como son los rascacielos símbolos de ostentación, no hay duda que en una sociedad como la actual pronto se deseará superar el record de altura. De hecho existen ya dos proyectos. Uno es el de la Torre Sky Mile proyectada para la ciudad de Tokio y que rondaría por lo visto los 1700 metros de altura total (¡increible!). El otro proyecto es el anunciado el pasado 10 de abril de 2016 y que va a ser llevado a cabo por el famoso, y a menudo polémico, arquitecto español Santiago Calatrava. Se trata de la Torre Creek Harbour, construcción que como podemos ver en la foto adjunta de una recreación a futuro de la misma, tendrá supuestamente una imagen espectacular, pretendiéndo convertirse en uno de los nuevos iconos de la ciudad de Dubai en la que se erigirá. En palabras de sus promotores, la forma de la torre se inspira en la de la flor de lirio y en el tradicional minarete de las mezquitas. ¡Por poesía que no quede!

Nosotros en Madrid, en el tema de rascacielos nos conformaríamos con que se resolviera satisfactoriamente de una vez el futuro del Edificio España. ¿No te parece?