
El Atlético de Madrid se ha proclamado campeón de la Europa
League y, a semejanza de lo que pasó con
La Cibeles cuando hace apenas unos
días se convirtió en centro de celebración del madridismo por la consecución de
la Liga Española 2012,
la fuente de Neptuno,
símbolo de la afición colchonera, se viste ahora de rojiblanco, siendo la primera vez que
en tan poco espacio de tiempo las dos fuentes emblemáticas del Paseo del Prado
reúnen a sus respectivas aficiones futbolísticas.
La Europa League es, tras la Champion, la competición internacional
de fútbol de más prestigio de las que se celebran en Europa, aunque como
irónicamente dice el padre a su hijo en un actual anuncio promocional del
Atlético de Madrid, eso “depende” (de que la ganes o no, -se entiende-, en
clara alusión a lo ocurrido a su rival madrileño en esta edición).

La Europa League, conocida hasta la temporada 2008-2009 como
Copa de la UEFA, surge como tal en 1971 cuando la UEFA asume la
reestructuración y modernización de la existente hasta entonces Copa de Ferias.
El Athletic Club fue el primer equipo español en llegar, en 1977, a la final de
este campeonato, aunque no consiguió ganarla (se jugaba entonces a doble partido y, aunque empató con la Juventus en el global de goles, perdió por el valor doble de los tantos conseguidos fuera de casa). Ocho años después fue el Real Madrid quién, por fin, se estrenó como ganador español de este trofeo. Hasta la fecha son cuatro los equipos de nuestro país ganadores de este campeonato, acumulando entre todos ellos un total de 7 triunfos:
Los clubes europeos con mayor éxito en esta competición son, en orden
cronológico, la Juventus, el Inter de Milán y el Liverpool, cada uno con 3
títulos.