La cumbre del monte de Cabeza Lijar es con sus 1823 m el punto más alto del municipio de Guadarrama y el
límite provincial de tres provincias colindantes: Madrid, Segovia y Ávila. La
subida a dicha cumbre se encuentra en los orígenes del montañismo madrileño y,
si eres amante de los paseos de naturaleza, esta puede ser sin duda una ruta de
las que merece la pena que no te pierdas, pues no siendo dura en exceso te va a
permitir disfrutar de unas inmejorables vistas panorámicas y descubrir de paso
algunos restos de construcciones que datan de la pasada Guerra Civil, como el fortín
y observatorio existente en la cima y sobre el que se ha construido un mirador (realmente
toda la zona en torno al Alto del León conserva aún numerosos restos de
edificaciones de dicha contienda: bunkers, puestos de ametralladora, refugios,
trincheras, parapetos, etc).
La ruta por la Cuenca del Guadarrama que aquí se propone es de carácter circular, con una
longitud totad de entorno a los 10,5 km. Como ya señalé no tiene excesiva
dificultad, aunque eso sí, hay que subir y bajar pendiente. Comenzaremos
nuestro recorrido en el mismo Alto del León (conocido por muchos más como el Puerto
de los Leones). Hasta allí lo mejor es ir en coche y dejarlo aparcarlo en el parking
del restaurante-asador. Ya a pie, nos dirigiremos hacia la derecha de dicho
establecimiento para tomar el camino inicialmente asfaltado que allí parte y
que indica dirección Camorritos. Caminando dejaremos atrás la estación militar
de radiotransmisiones y poco después pasaremos un paso canadiense (esa especie
de barrera horizontal metálica que impide que el ganado lo cruce pero
posibilita el acceso de personas y vehículos). Nada más pasarlo dejaremos la
carretera y tomaremos el sendero que a la derecha asciende entre pinos hacia el
monte, en concreto al conocido como Cerro Piñonero. En el alto de este,
ligeramente escorado hacia el lado izquierdo de la cumbre, existe un
bunker-observación desde el que se controlaban los posibles movimientos de
tropas en el valle y que hoy, por suerte sin intenciones belicosas, nos permite
admirar el paisaje.
Regresamos de nuevo a nuestra senda, que atraviesa la cumbre, y en inicial bajada encaminaremos ahora nuestros pasos hacia Cabeza Lijar que el la cumbre que se nos
muestra justo enfrente un poco a la derecha. Seguiremos como antes las marcas del GR 10 y marcas azules, pasando por el llamado Collado de la Gasca, en donde tendremos que cruzar por una
puerta al lado Segoviano. A partir de allí comienza la subida a Cabeza Lijar y
es sin duda la parte más dura del recorrido pues a la pendiente se suman algunos
tramos con piedras que se van superando sin grandes dificultades si nos los
tomamos con calma. En la cima tenemos la recompensa a nuestro esfuerzo: Unas
vistas increíbles.
Tras la subida a la cima ahora toca bajar, y lo haremos
continuando por el sendero. Tendremos que atravesar la valla y aunque en algún
tramo perdamos la referencia de las señales no hay pega, pues deberemos salir
al camino de Camorritos que se encuentra en el lado izquierdo del cerro. Una
vez en el mismo sólo nos queda ya volver por dicho camino hasta el que fue
nuestro punto de partida.
El esfuerzo realizado seguro que nos habrá merecido la pena
y podemos celebrarlo tomándonos en la cafetería restaurante un refrigerio, o
una bebida calentita si el tiempo serrano lo aconseja mejor opción.
¡Disfrutarlo!